JBS, gigante de la ganadería industrial, comienza a cotizar en NY

A pesar de causar devastación ambiental, un inmenso sufrimiento animal, abusos laborales y evasión fiscal, JBS ha comenzado a cotizar en la Bolsa de Nueva York.

Se espera que a partir del 12 de junio del 2025 la Bolsa de Nueva York (NYSE, por sus siglas en inglés) comience a negociar acciones de JBS, el mayor productor de carne del mundo.

Esta decisión ignora la abrumadora evidencia del papel de JBS en la deforestación ilegal, la destrucción ambiental, el maltrato animal y la evasión fiscal.  

La Bolsa de Nueva York no solo está mirando hacia otro lado. Está abriendo deliberadamente sus puertas a una corporación sustentada en conductas delictivas y podría estar arriesgándose a ser cómplice de lavado de dinero. 
Esto no es solo un fracaso en la ética corporativa. Es una amenaza para el Estado de derecho, el bienestar animal y el futuro de nuestro planeta. 

Un criminal climático y del bienestar animal, ahora bienvenido en Wall Street 

JBS es responsable del sufrimiento de millones de animales cada año. 
Sus operaciones de ganadería industrial y mataderos se caracterizan por el confinamiento extremo, mutilaciones sin tratamiento para el dolor y una eficiencia despiadada orientada al lucro. Pero la crueldad es solo una parte del problema.

Las cadenas de suministro de JBS están vinculadas a una deforestación ilegal generalizada en Brasil, incluyendo terrenos talados en territorios indígenas y áreas de conservación.

Según investigaciones recientes, JBS se beneficia del “lavado de ganado”: trasladar animales desde granjas ilegales a proveedores “limpios” para ocultar su origen y cumplir con reglas de trazabilidad débiles.

Al importar y lucrar conscientemente con carne vinculada a la deforestación ilegal, las acciones de JBS podrían cumplir con los criterios para conductas criminales bajo la ley estadounidense contra el lavado de dinero (AML, por sus siglas en inglés), incluyendo la Ley Lacey y el código 18 U.S.C. §1956.

Estas ganancias, ahora ofrecidas a inversores internacionales a través de la Bolsa de Nueva York, podrían ser producto de actividades ilícitas. 

Tricia Croasdell, CEO de World Animal Protection:

La vergüenza recae sobre la Bolsa de Nueva York, ya que han decidido listar a un culpable climático y abusador de millones de animales. No nos quedaremos en silencio al exponer a JBS, el mayor proveedor de carne del mundo, como una de las multinacionales más destructivas, crueles y poco éticas.

"Además de su espantoso maltrato animal, JBS ha acumulado una lista de condenas, multas y escándalos por sobornos, corrupción, fijación de precios, abusos a los derechos humanos y una devastadora deforestación." 
 
"Sus emisiones rivalizan con las de países enteros, las cuales han aumentado constantemente en los últimos años a pesar de las declaraciones sobre metas de cero emisiones netas. Como revelamos en nuestro informe reciente, JBS transfiere sistemáticamente sus ganancias a paraísos fiscales, alejándolas de los países donde opera. Está fallando moralmente y anteponiendo las ganancias por encima de las personas, los animales y el planeta."

La Bolsa de Nueva York corre el riesgo de violar leyes contra el lavado de dinero

Mighty Earth ha enviado un aviso legal a la Junta de la Bolsa de Nueva York (NYSE), alegando que permitir que JBS cotice podría poner a la Bolsa en incumplimiento de las leyes estadounidenses contra el lavado de dinero. 
El aviso sostiene que, al facilitar potencialmente la venta de acciones respaldadas por ganancias provenientes de la deforestación ilegal, la Bolsa de Nueva York podría estar facilitando la distribución de ganancias delictivas.

Además, cita la Ley Lacey, que prohíbe que productos derivados de delitos ambientales cometidos en el extranjero, incluyendo carne proveniente de áreas deforestadas ilegalmente, ingresen al mercado estadounidense 
Según el aviso, las transacciones financieras que involucren dichos productos podrían constituir lavado de dinero.

El aviso legal plantea preocupaciones de que, al continuar con la cotización a pesar de los vínculos documentados entre JBS y delitos ambientales, la Bolsa de Nueva York corre el riesgo de ser percibida como deliberadamente negligente, una acusación que podría acarrear consecuencias legales. 

¿Es JBS una inversión responsable? 

JBS no es ajena a los escándalos. Su historial incluye:

• Condenas y multas por cientos de millones de dólares por sobornos, corrupción, fijación de precios, deforestación ilegal y violaciones al trabajo infantil.
• Abusos laborales documentados y graves violaciones a los derechos humanos, incluyendo la explotación de trabajadores migrantes y condiciones laborales inseguras.
• Evasión fiscal mediante el traslado de ganancias a paraísos fiscales, privando a los gobiernos de fondos públicos vitales.
• Un incumplimiento constante de sus propios compromisos climáticos y contra la deforestación, a pesar de promesas públicas reiteradas. 

World Animal Protection ya había señalado estos problemas cuando JBS intentó cotizar en 2021. Nada ha cambiado. Los delitos han continuado, las emisiones han aumentado y los animales han seguido sufriendo. 

La Bolsa de Nueva York debe rendir cuentas 

La Bolsa de Nueva York tiene la responsabilidad de mantener la integridad del sistema financiero estadounidense. Cotizar a JBS no solo violaría sus deberes éticos, sino que podría también infringir la ley. 
 
Este es un grave error que podría legitimar la destrucción ambiental, premiar la crueldad hacia los animales y normalizar el lavado de ganancias ilícitas a través de las finanzas globales.

World Animal Protection, junto con socios de la sociedad civil en la coalición Drop JBS, continuará exponiendo esta injusticia y exigiendo responsabilidad a todas las partes involucradas.